El Real Oviedo conquista el feudo ferrolano, da un golpe encima de la mesa, suma su primera victoria del 2024 y se queda, momentáneamente, a un punto de los puestos de playoff. Este equipo va en serio

Ningún equipo había ganado en A Malata en todo el año 2023. Se suele decir que año nuevo, vida nueva. Y después de un empate en el Tartiere que no dejó contento ni al conjunto azul ni al Amorebieta, el Real Oviedo ha demostrado que esta temporada va en serio y ha sido el primer equipo de la Segunda División en romper esa tendencia. Después de más de un año, el Racing de Ferrol perdió ante su gente. Y en clave futbolística, el conjunto carbayón se sobrepuso, en la segunda parte, a un golazo de Iker Losada y firmó una de esas remontadas que van a tardar mucho en olvidarse (1-3).

El ambiente en A Malata era sensacional. Cerca de mil oviedistas llenaron uno de los córners del estadio ferrolano y el resto era de afición del Racing. Y, sobrecogido por la atmósfera, el Oviedo salió algo timorato. Pero ese miedo se fue rápido gracias al buen hacer de Viti y Jimmy, los dos futbolistas azules que consiguieron neutralizar las primeras llegadas del Racing de Ferrol. Y tan sólo habían pasado cinco minutos. Después de ese buen inicio de los locales, el Oviedo se serenó y empezó a jugar con algo más de calma, pero sin olvidarse de su gran virtud: atacar y salir corriendo. Y con el paso de los minutos, ya se vio a ese Oviedo que Luis Carrión quiere.

Jimmy, Colombatto y Dubasin fueron los jugadores más activos del conjunto azul en los primeros compases del duelo y, poco a poco, fueron poniendo en apuros a Ander Cantero y compañía. De hecho, fue el centrocampista argentino el único que sí hizo trabajar al guardameta del Racing de Ferrol. Sobre todo a balón parado, uno de los rasgos que definen al Oviedo de Carrión. No obstante, la ocasión más clara llegó en el minuto 23. Dubasin centró por banda derecha, Bastón no consiguió rematar y el balón suelto lo cazó Abel Bretones, pero el disparo del lateral langreano se estrelló en el palo izquierdo de la portería de Ander Cantero. La ocasión del ’23’ confirmó las buenas sensaciones azules. Sin embargo, al llegar a la media hora de encuentro, el partido se volvió a igualar, el equipo de Cristóbal Parralo empezó a situarse mejor y los rechaces dejaron de caer del lado visitante. Eso sí, el Racing de Ferrol no estaba siendo capaz de hacer trabajar a Leo Román. Y antes del 40, el Oviedo volvió a gozar de una ocasión clarísima. Colombatto botó un córner muy cerrado y, cuando los cerca de mil oviedistas ya estaban cantando el gol, Dani Calvo remató ligeramente desviado. Otra ocasión desperdiciada por el equipo asturiano. Y así se llegó al intermedio. El Oviedo dominando y el Racing de Ferrol buscando el contraataque.

Viti conduce un balón en el Racing de Ferrol vs Real Oviedo. Fuente: Real Oviedo

Tras el paso por los vestuarios, la película cambió por completo. El Racing de Ferrol dejó atrás esa pereza y en el primer acercamiento serio que tuvo… 1-0. Iker Losada recibió en el centro del campo, avanzó hasta el borde del área y con el interior de su pie derecho se sacó un disparo imposible para Leo Román. El centrocampista pontevedrés tiene más clase que un colegio y consiguió que el balón botase antes de ir directo hacia la portería. Pequeño chasco para los azules que veían cómo su planteamiento se rompía a las primeras de cambio. Sin embargo, el gol del Racing de Ferrol no desmoralizó al conjunto carbayón. Al revés. Los asturianos sacaron esa garra que les caracteriza cuando las cosas vienen mal dadas y se puso manos a la obra. La buena noticia es que la reacción llegó rápido. Nueve minutos después, Colombatto sacó la magia desde el córner y Masca estuvo rápido a la hora de rematar. El cabezazo del portugués no parecía letal, pero la falta de reflejos de Jon García y Ander Cantero provocó el 1-1 del Oviedo.

El gol le sentó de lujo al Oviedo. Y los de Luis Carrión volvieron a ser el equipo dominador del primer acto. Ocasiones por allí, llegadas por allá y el 1-2 se empezaba a oler en A Malata. Y el olor del gol es muy característico. Pero al equipo azul le faltaba algo más. Alemao y Seoane estaban preparados para entrar y, antes de su ingreso en el campo, Sebas Moyano sacó la varita mágica y se sacó uno de esos disparos que sólo pueden hacer los futbolistas grandes. Y el cordobés es uno de ellos. Derechazo desde la frontal que se coló por la escuadra de la portería de Cantero. La esquina azul se vino abajo. Sin embargo, esa excitación se enfrió rápido, ya que en el minuto 74 una persona de seguridad del estadio se desplomó y hubo que esperar más de diez minutos para que la ambulancia llegara A Malata. La espera fue tensa y se vio una de esas imágenes que engrandecen el lado personal de un futbolista. Los jugadores del Racing de Ferrol y del Oviedo movieron la valla publicitaria para que el vehículo pudiera pasar. 12 minutos después, el juego se reanudó y los aplausos se convirtieron en el común denominador. La espera pudo haber sido mucho menor si Cordero Vega se hubiese dado cuenta del incidente antes. Mala gestión por parte del trencilla cántabro.

Antes de la reanudación, se podía esperar un bajón de rendimiento por parte de ambos equipos, pero tanto Racing como Oviedo siguieron enchufados. Cordero Vega anunció 17 minutos de descuento (algo muy pocas veces visto en un partido de fútbol) y, aprovechando la prolongación, el Racing de Ferrol apretó para buscar el 2-2. Y a partir de ese momento, el colegiado empezó a pitar cosas incomprensibles. Por ejemplo, una falta inexistente de Colombatto sobre Losada al borde del área que, de no ser por Leo Román, hubiera supuesto el empate. Esa ligero favoritismo, por llamarlo de alguna manera, le dio exactamente igual al Oviedo, que siguió de dulce. El equipo de Carrión aguantó las embestidas locales y, a tres minutos del final, Alemao sentenció el encuentro. El delantero brasileño aprovechó un gran balón al espacio de Santi Cazorla y se marcó un Juan Palomo: yo me la guiso y yo me la como. Internada hasta el área, recorte y cuando parecía que la jugada se terminaba, el atacante de Campo Ere se sacó un misil para volver a batir a Ander Cantero y colocar el 1-3 para el Oviedo. Ahí se acabó el partido. El Oviedo no ganaba fuera de casa desde el 1 de octubre de 2023, cuando venció por idéntico resultado al Eldense. Curiosamente, otro equipo que llevaba sin perder en casa más de un año y medio. Este Oviedo está tocado por una varita. Nueva victoria lejos del Tartiere, 34 puntos e ilusión desbordante por parte de la parroquia carbayona. Este equipo está a tiempo de todo y promete dar mucha guerra.

Ficha técnica

Racing de Ferrol: Ander Cantero; Julián Delmás (Merino, min. 88), Jon García, Álex Martín, Moi Delgado; Bernal, Álex López (Señé, min. 53); Nacho (Nico Serrano, min. 68), Losada, Héber Pena (Chuca, min. 68); Álvaro Giménez.

Real Oviedo: Leo Román; Viti, Oier Luengo, Dani Calvo, Abel Bretones; Jimmy, Colombatto; Masca (Seoane, min. 72), Dubasin (Paulino, min. 94), Sebas Moyano (Santi Cazorla, min. 101); Borja Bastón (Alemao, min. 72)

Goles: 1-0 Iker Losada (min. 48); 1-1 Masca (min. 57); 1-2 Moyano (min. 70); 1-3 Alemao (min. 104)

Árbitro: Cordero Vega, comité cántabro. Amonestó a los locales Bernal (min. 19), Álex Martín (min. 35) y a los visitantes Dani Calvo (min. 42), Masca (min. 57) y Leo Román (min. 102).

Estadio: A Malata (Ferrol). 7.595 espectadores, con unos 750 oviedistas.